La protesta contra el aumento de tarifas en el transporte público en Monterrey ha escalado en tensión luego de que Luis ‘N’, integrante del colectivo ‘Voz de los Usuarios’, fuera vinculado a proceso por cinco delitos. La detención del manifestante, efectuada durante la jornada del sábado 20 de abril frente al Palacio de Gobierno, ha generado indignación entre colectivos ciudadanos, quienes acusan a las autoridades de cometer abuso de autoridad en su captura y manejo posterior.
La Fiscalía General de Justicia del Estado confirmó la vinculación a proceso de Luis ‘N’ mediante un comunicado breve, señalando que se le imputan los delitos de desorden público, daño en propiedad ajena, daño en propiedad ajena agravado, delitos contra instituciones oficiales y servidores públicos, así como resistencia de particulares. A pesar de las acusaciones, el juez de control determinó que el proceso podrá llevarse bajo la modalidad de arraigo domiciliario, con la utilización de un brazalete electrónico que permita monitorear su ubicación durante la investigación complementaria.
Se estableció que el plazo para concluir esta etapa de investigación es de dos meses a partir de la fecha de vinculación. Mientras tanto, colectivos sociales, familiares y simpatizantes mantienen su exigencia de liberación y respeto a los derechos humanos del activista.
Detención tras protesta contra el ‘tarifazo’ en Nuevo León
La detención de Luis ‘N’ ocurrió en el contexto de una protesta ciudadana realizada el pasado sábado 20 de abril, cuando diversos colectivos se congregaron en la Explanada de los Héroes para manifestar su inconformidad con el incremento a las tarifas del transporte público anunciado recientemente.
De acuerdo con la versión oficial, Luis habría participado en actos de violencia al agredir a elementos de la Fuerza Civil que resguardaban la zona y al causar daños materiales en la fachada del Palacio de Gobierno. Las autoridades señalaron que durante la manifestación se registraron momentos de tensión, donde algunos participantes rompieron el cerco de seguridad, lo que llevó a confrontaciones directas entre manifestantes y agentes policiacos.
Tras su detención, Luis ‘N’ fue trasladado a instalaciones de Fuerza Civil, y según denuncias de su esposa, Kelly Torres, y de colectivos ciudadanos, se mantuvo incomunicado durante dos días. De acuerdo con el testimonio de su familia, no se permitió su acceso a una llamada telefónica ni a representación legal durante ese lapso, lo cual consideran una violación grave a sus derechos fundamentales.
La falta de información inmediata sobre su paradero y estado físico provocó que organizaciones defensoras de derechos humanos alzaran la voz, solicitando la intervención de organismos independientes para garantizar el debido proceso. La acusación de abuso de autoridad cobró fuerza cuando se difundió que el detenido contaba presuntamente con un amparo vigente, mismo que, aseguran, fue ignorado por los elementos de seguridad en el momento de su aprehensión.
Protesta frente al Palacio de Justicia
La detención de Luis ‘N’ desató nuevas movilizaciones en la capital de Nuevo León. El lunes posterior a su arresto, cerca de 50 manifestantes se congregaron frente al Palacio de Justicia para exigir su liberación y denunciar lo que consideran una criminalización de la protesta social.
Durante la manifestación, los inconformes bloquearon de forma intermitente las avenidas Rodrigo Gómez y Fidel Velázquez, afectando el tráfico vehicular por algunos minutos. Entre las principales consignas, destacaron las exigencias de respeto al derecho a la libre expresión y a la protesta pacífica, así como el cese de la represión gubernamental contra los movimientos sociales.
Los colectivos también cuestionaron el papel de Fuerza Civil, señalando que el uso de la fuerza en eventos de protesta debe ser el último recurso y no una medida recurrente para disolver movilizaciones legítimas. Además, criticaron al gobierno estatal encabezado por Samuel García, a quien acusan de implementar políticas restrictivas en contra de quienes alzan la voz frente a decisiones públicas impopulares.
Organizaciones civiles y defensores de derechos humanos hicieron un llamado a observar el desarrollo del proceso legal de Luis ‘N’, con el objetivo de evitar irregularidades que vulneren aún más sus derechos. El caso también fue turnado a instancias de seguimiento de detenciones arbitrarias para evaluar si se cometieron violaciones al debido proceso.
Por su parte, la Fiscalía ha defendido la actuación de los elementos policiacos, asegurando que la detención respondió a hechos concretos de violencia y daños a instalaciones públicas. Sin embargo, el debate sobre el uso de la fuerza en contextos de protesta sigue abierto entre diversos sectores sociales.
Array