El caos vial provocado por las obras de la Línea 6 del Metro en la Avenida Miguel Alemán está afectando gravemente a empresas y comercios de la zona. Lo que debía ser un proyecto de movilidad eficiente se ha convertido en un problema constante para quienes viven y trabajan en Apodaca, Guadalupe y San Nicolás. Desde demoras interminables hasta cierres temporales de negocios, los efectos negativos crecen día con día, sin que el gobierno estatal ni los municipios actúen para mitigar los daños.
La situación es especialmente crítica en el tramo cercano al Boulevard Aeropuerto, donde las filas de vehículos alcanzan varios kilómetros durante las horas pico. Las quejas de empresarios, trabajadores y comerciantes han sido constantes, pero la respuesta oficial brilla por su ausencia. El resultado es una economía local asfixiada por la falta de planeación, coordinación y acción de las autoridades.
Empresas sufren por el caos vial
Numerosas compañías ubicadas en parques industriales cercanos a Miguel Alemán han expresado su preocupación por las pérdidas operativas que les está causando el caos vial. Según testimonios recabados durante las últimas dos semanas, los tiempos de traslado de empleados y proveedores se han duplicado o incluso triplicado.
Un directivo de una empresa del Parque Industrial Stiva, en Apodaca, declaró que salir de la zona puede tardar hasta una hora. Esta situación no solo afecta la productividad, sino también las entregas, la logística y la relación con los clientes. Lo más preocupante, dijeron, es que las autoridades no han implementado ningún operativo de tránsito que alivie la situación. Ni el estado ni los municipios se han acercado para coordinar acciones que reduzcan los estragos.
Las pérdidas económicas ya son visibles. Empresas con producción ajustada a tiempos precisos reportan retrasos que afectan sus compromisos nacionales e internacionales. Lo que debía ser un proyecto que conectara mejor la ciudad, está generando un escenario de parálisis y frustración para la industria.
Comercios pierden hasta 80% en ventas
Los negocios ubicados sobre la Avenida Miguel Alemán también han sido duramente golpeados. Restaurantes, tiendas y pequeños comercios reportan caídas drásticas en sus ventas, algunas de hasta un 80%. La dificultad para acceder a los establecimientos ha provocado que muchos clientes dejen de acudir, y el tráfico espeso ahuyenta hasta a los más fieles consumidores.
Juan Mireles, trabajador del restaurante La Pesca en Guadalupe, relató que el negocio tuvo que cerrar temporalmente debido a la baja afluencia. Algo similar ocurre en Pecos Bill, otro restaurante que evalúa cerrar de manera indefinida hasta que terminen las obras.
Félix Alfaro, su gerente, dijo que les advirtió a sus empleados que si las calles se cerraban, sería mejor no abrir. Asegura que trabajar así no es rentable. Como ellos, otros negocios enfrentan decisiones difíciles en medio del abandono institucional. No hay apoyos ni medidas compensatorias del Gobierno para estos establecimientos, que ahora ven en riesgo su permanencia.
Gobierno ausente ante el caos vial
Uno de los puntos más señalados por los afectados es la falta de planeación y diálogo del Gobierno estatal y municipal. Empresarios recuerdan que durante la ampliación anterior de Miguel Alemán sí existía un comité coordinador, donde participaban autoridades y representantes de los parques industriales. Eso permitía organizar cierres parciales, dar avisos y establecer rutas alternas.
Hoy, denuncian, no hay absolutamente nada. Las decisiones se toman sin consultar a nadie, y la ejecución de las obras avanza sin una estrategia clara para reducir el impacto vial. Los municipios de Apodaca, Guadalupe y San Nicolás también han fallado. Ninguno de los alcaldes ha propuesto soluciones reales, ni ha desplegado operativos eficientes de tránsito en los puntos más afectados.
El proyecto, impulsado por el Gobernador Samuel García, inició en febrero de 2023. La Línea 6 del Metro promete conectar el Aeropuerto Internacional de Monterrey con el centro de la ciudad. Sin embargo, los constantes retrasos y la falta de atención a los efectos colaterales han puesto en entredicho su viabilidad social. Aunque el mandatario asegura que estará lista antes del Mundial 2026, en la actualidad el avance visible es mínimo y los problemas son cada vez mayores.
En lugar de brindar soluciones de movilidad, el proyecto ha generado un entorno de desesperación en toda la población de Nuevo León. La movilidad en Miguel Alemán está colapsada, la productividad disminuye y la economía local sufre las consecuencias de una obra pública que no tomó en cuenta a su entorno.
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